La vida sería más fácil y ya no sería vida.

En las largas noches sin dormir, llegan los momentos de lucidez o estupidez, hay una fina línea que separa estos momentos, como otras muchas finas líneas que separan otras tantas cosas. En estas noches, sintiéndome muy pequeño, miro al firmamento, en busca de alguna respuesta. Miles son los recuerdos que pasan por mi cabeza, como cuando llueven estrellas fugaces, pero de manera ralentizada. Y de esta forma unos penetran en mi cuerpo suavemente y otros se van clavando poco a poco como puñales en la espalda. Recuerdos de algo que fue, que pudo ser y no fue, y que no se si volverán a ser.

Miro y vuelvo a mirar y no hallo respuesta, se que probablemente habite en mi interior, y en la afirmación de que las cosas suceden por alguna razón en concreto. He leído, que cada estrella tiene su propia dirección, que quedó establecida en el principio de los tiempos, y que esta está escrita en algún libro, quizá como el destino de las personas, como en aquella película, que tanto me gustó últimamente "Destino Oculto", donde las decisiones de los seres humanos y su camino en la vida, venían escritos para que acometiésemos un fin determinado. Si tan sólo pudiéramos ojearlo un instante... pues la vida sería más fácil y ya no sería vida.

También he leído y me gusta pensar en la convivencia de ambas ideas, que las estrellas, son dueñas de si mismas, que siguen un curso errante y que solo su capricho las mueve a donde quieran ir. Más en estas noches, pero en realidad todas y cada una de las noches, miro al cielo, en busca de que alguien me escuche... y agradezco la vida que me ha tocado vivir, y pido salud y suerte para todos los que quiero, muchas de esas noches sonrío con seguridad y otras intento simplemente sonreír...

Mis entrenos... pues no iba mal la semana, buenas sensaciones a pie y en el agua no eran malas, teniendo en cuenta, que arrastró muchas molestias en el hombro, que esta tarde pondré en manos de Fisiotec... pero ahora lo que me preocupa son las secuelas de la caída de ayer, sufría un encontronazo con una valla de una de las tantas obras, que en estos días cercanos a las elecciones tienen lugar. Más fallo mío, por despistado, que de la obra en cuestión, levantaba la cabeza y me la encontraba de frente, cayendo con la cadera en el suelo y haciéndome daño en el dedo gordo de la mano, que no se donde metí, y cuya uña espero no perder. Camino con dolor, aunque ahora algo menor, y no se si esta tarde podré hacer las series que estaban programadas.

Con hambre de victoria pero aceptando las derrotas de ellas brotan lo aprendido y dan sentido a esta existencia rota, te ayudan a crecer interiormente y madurar.

I'm up in the woods, I'm down on my mind.

I'll be positive & See you @ Volcano.